miércoles, 6 de mayo de 2015

EL REQUETÉ

Este fin de semana aprovechando que gracias al puente de mayo y al día de la madre nos hemos juntado casi toda la familia, hemos salido a comer con la excusa de celebrar tanto este día como la elección de especialidad médica de mi primo pequeño y para ello nos juntamos en un restaurante que personalmente no conocía, se llama EL REQUETÉ, nombre archiconocido para las personas de cierta edad de Cáceres  pero que sin duda no relacionaría con comida sino con los grandes almacenes que llevaban este nombre y que desaparecieron años atrás. Pero sin más, os voy a explicar mi experiencia.

DECORACIÓN

Está dividido en cuatro partes, una terraza externa situada en la Plaza Mayor, una entrada con mesas altas y una barra, sin duda diseñada para picotear algo; un salón comedor no demasiado grande y una terraza interior que luego descubrimos es usado como comedor y como sala de fumadores.

Nosotros comimos en la zona terraza interna- fumadero. Las mesas son negras y las sillas son cómodas. Lo que no es cómodo para nada, aunque sí es bonito y original, es el mantel tú y yo que usan, pues con su color verde intenta imitar el césped pero los largos hilos de silicona que se entremezclan a modo de garabato, lo único que consigue es dejarte marcas en los brazos y que no puedas apoyar ni manos ni antebrazos en la mesa.Una cosa muy original que tienen es la forma de colocar los cubiertos y las servilletas en la mesa, pues todo viene empaquetado en una especie de sobre vertical de papel marrón con dos apartados, uno para la servilleta y otro para los cubiertos.

Por lo demás, al menos en la terraza, el ambiente es agradable, cuenta con un techo móvil, que hace que no se sienta la humedad y el calor típico de las terrazas interiores techadas, además entra una luz natural que hace que el ambiente sea inmejorable.

COMIDA

  Su carta cuenta solo con dos hojas, en la primera nos encontramos el menú, en ese caso el correspondiente al del fin de semana que llevaba una sopa de tomate fría o caliente ( a elegir) con fruta, un bacalao marinado acompañado con un revuelto de gambas, una costilla a la barbacoa y el postre: piña natural acompañada de una bola de helado de coco y de pequeños bizcochitos,( la bebida no está incluida), este menú lo degustó la mayor parte de los comensales y todos ellos quedaron en general muy satisfechos. Por otra parte, en el resto de la carta hay varios platos de picoteo como son las croquetas de jamón acompañadas de foie, y platos principales como hamburguesa, albóndigas de
retinto con pulpitos o solomillo con setas. Esos fueron los platos que comieron el resto de los comensales, y estaban todos bastante buenos.

Con respecto a los postres, hay cuatro o cinco para elegir, nosotros elegimos el tiramisú. He de decir que yo me esperaba un típico plato de tiramisú, y lo que me encontré fue este postre italiano hecho tartaleta helada, bueno más bien congelada, casi imposible de partir con la cuchara, pero imaginaos cuál fue mi sorpresa al descubrir que esa no era la consistencia que debía tener mi postre sino que los cocineros no habían descongelado bien mi postre. Finalmente me lo cambiaron por otro que había sido completamente descongelado y no tenía nada que ver con el primero. ¿ Mi opinión? No muy buena la verdad, se notaba que no era casero y si bien se podía comer, no volvería a pedirlo.

PRECIO

El precio del menú del que os he hablado en el punto anterior es de 18€ y os recuerdo que la bebida no está incluida. El resto de los platos de los que os he hablado rondan desde los 8 a los 16€, a excepción de los postres que si mi memoria no me falla están en torno a los 4€. Es decir, no es un sitio que todos se puedan permitir de forma habitual, aunque según me han comentado, los días de diario tiene un menú un poco más asequible.

EL TRATO DEL PERSONAL

Sinceramente el servicio es normal, nada que destacar, correcto sin más, quizás un poco frío a momentos. En general nos trataron bien, pero el hecho de traernos un postre congelado y de que no le ofrecieran otra opción de menú a mi tía ( alérgica al pescado) más que compartirlo con otra persona, me parecieron detalles poco cuidados y feo y a destacar un poco negativamente.

LOCALIZACIÓN

Su situación es envidiable, se encuentra en los portales de la Plaza Mayor de Cáceres, es decir, está enmarcado en un edificio histórico de la ciudad y se encuentra frente a la parte monumental. Sus vistas desde la terraza exterior son magnificas.

OTROS

La única cosa que me gustaría resaltar en este apartado es el hecho de que la terraza interna se usa como lugar al que van a fumar los comensales de las demás partes del restaurante. Yo vivo con un fumador y estoy acostumbrada al humo pero el único momento en que no lo soporto es mientas como y tener a otras personas fumando en la mesa de al lado, sobretodo si tenemos en cuenta que no están comiendo allí me parece un punto muy negativo. Aunque estoy convencida de que a los fumadores les encantará saber que existe un lugar donde pueden fumar después de comer sin levantarse de la silla.



Si habéis estado ya y os encanta o lo odiáis, si no lo conocíais y he abierto la veda de vuestra curiosidad, no dudéis en decírmelo en los comentarios, estaré encantada de leeros.